¿Solo pensar en empezar una dieta para adelgazar te hace fruncir el ceño? Antes de dejarte convencer por los falsos mitos que atribuyen a la alimentación saludable, te invitamos a seguir nuestro post de hoy. En los párrafos siguientes descubrirás los ingredientes ideales para empezar el día con una sonrisa, gracias a unos desayunos para adelgazar sabrosos y equilibrados.
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Empezamos con las bases de los desayunos para adelgazar:
Cereales y pseudocereales. Deberían estar presentes en cada desayuno, puesto que contienen proteínas, vitaminas y carbohidratos que se digieren y se asimilan gradualmente. Con una buena dosis de cereales o pseudocereales (como la quinoa, la chía o el amaranto) en el desayuno te sentirás con fuerzas durante más horas y evitarás picotear antes del almuerzo.
Fruta y verduras de temporada. La fruta y la verdura de temporada, a poder ser de proximidad, contiene las vitaminas y sales minerales que nuestro cuerpo necesita en ese determinado período del año. El agua y la fibra vegetal presentes en frutas y verduras también son unos nutrientes importantes para las primeras horas del día, puesto que ayudan al cuerpo a rehidratarse y mejorar las funciones digestivas arrancando con más vitalidad.
Frutos secos y semillas. Los frutos secos también representan un ingrediente imprescindible en un desayuno equilibrado, porque son fuente de sales minerales y ácidos grasos. Es evidente que hay que tomarlos en pequeñas cantidades porque mucho más calóricos. Las semillas, en cambio ofrecen un variado abanico de posibilidades para dar gusto y energía al desayuno, sin exceder con las calorías. Desde el cacao y el café, hasta las semillas de chía y sésamo, estos pequeños concentrados de nutrientes son perfectos para empezar el día.
Leche y bebidas vegetales. Las vitaminas y las proteínas de la leche son otro ingrediente ideal para el desayuno y muy arraigado en nuestra cultura. Para muchos no empieza el día sin un buen café con leche. Empezar un régimen para adelgazar no quiere decir olvidarse de estos placeres, pero es importante elegir opciones desnatadas o vegetales para reducir el aporte de grasas.
Lunes: Té, Infusión o Café con leche (con poco azúcar moreno u otro edulcorante natural). Dos tostadas de salvado de trigo y una fruta de temporada
Martes: Gachas preparadas con 4 cucharadas de copos de salvado de avena, un vaso de leche descremada o bebida vegetal, una fruta de temporada y 1 cucharada de semillas de lino o de chía.
Miércoles: Batido con leche desnatada o bebida vegetal, una fruta de temporada y una cucharada de cacao amargo en polvo.
Jueves: 2 cucharadas de quinoa hervida, 1 yogur desnatado sin azúcar, 2 nueces, 2 dátiles o 2 orejones cortados en pedacitos.
Viernes: Zumo de cítricos natural, una tostada de pan integral acompañada de queso fresco ligero, tomate y tomillo seco.
Sábado: Ensalada de frutas variadas con un yogur desnatado y 2 cucharadas de muesli de cereales y frutos secos.
Domingo: Café con leche, Té o Infusión y crepes de harina de avena y agua rellenas de mermelada preparada en el momento con fruta de temporada.
Si tus mañanas son una lucha contra el reloj y no logras encontrar un tiempo para la preparación del desayuno, recuerda que entre nuestros productos encuentras ideas para desayunos completos y saludables para empezar el día con energía sin afectar a tu línea.
Si has llegado hasta aquí, habrás comprobado que los desayunos para adelgazar pueden ser no solo sabrosos y equilibrados sino que muy variados. Solo tienes que elegir: ¿qué te apetece desayunar hoy? Descarga el eBook a continuación con las mejores recetas.
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