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¿A quién no le gusta disfrutar un delicioso helado cuando aprieta el calor? Se trata, sin duda, del rey del verano, aunque cada vez son más las personas que deciden disfrutarlo durante todo el año. Ahora bien, ¿el helado engorda? ¿Puedes comer todo el que quieras sin preocuparte por la ingesta calórica? Hemos investigado acerca de los helados y traemos todas las respuestas que necesitas saber. Para que no te amargue (el verano) un dulce.
Como su nombre indica, el helado es un alimento congelado. Lo más habitual es que en su preparación incluya algún tipo de lácteo, como leche o crema, que se combina con frutas, saborizantes y endulzantes (azúcar, miel, etc.) También puede incluir otros ingredientes, entre ellos, chocolate, yemas de huevo, frutos secos, galleta o yogur. Todos estos ingredientes ya nos pueden ayudar a valorar cuánto engorda un helado. 
Podemos clasificar los helados según su calidad o según su forma de servirlo. En cuanto al primer criterio se distingue entre:
Si nos referimos a la forma de servirlo, entonces distinguiremos entre los helados de palo, de cono, de vasito o de copa. Este último suele ir acompañado de otros ingredientes, como trozos de fruta, nata o siropes.
Quizá pienses que no, pero comer helado aporta nutrientes. Según la Base de Datos Española de Compòsición de Alimentos, el helado de chocolate aporta vitaminas (en diferentes proporciones A, D, E, B12 y C); minerales (calcio, hierro, potasio, magnesio, sodio, selenio y zinc) y una pequeña porción de fibra. El inconveniente es que todo ello viene acompañado de grasas saturadas, un número elevado de hidratos de carbono y bastantes calorías.

Según la citada Base de Datos Española de composición de Alimentos, las calorías del helado oscilan entre las 200 y las 228, dependiendo del sabor.
Un graciosillo te diría que el helado que engorda menos es el que no te comes. Ya sabes que lo único que no engorda es el agua así que si comes helados has de asumir que te va a engordar. La clave está en comerlo de forma puntual, para que las calorías del helado no comiencen a acumularse en tu cuerpo. Además, te recordamos que la práctica deportiva te ayudará a conseguir una mejor composición corporal y mantenerte en forma. Hacer un mindful eating y ser consciente de lo que comes es muy importante, pero ha de complementarse con la práctica deportiva. 
No sabemos muy bien de dónde sale esa teoría de que el helado de vainilla engorda menos que los demás, pero circula por ahí. El caso es que ya has leído que sí, que el helado de vainilla engorda. No es el más calórico, pero tampoco el menos, ya que, como te dijimos, el sabor de helado que menos engorda es el de fresa.
¿El helado saludable existe? ¡Claro que sí! Aunque puedes animarte a probar los helados artesanos, la mejor opción para disfrutarlo es que lo hagas tú misma en casa. Hay infinidad de recetas para que puedas prepararlo, aunque te vamos a dejar algunas claves para que no tengas que comerte mucho la cabeza buscando información.

Estamos seguros de que imaginas que este apartado tiene truco y no te falta razón. Comer helado y no engordar es casi imposible, aunque sí hay algunas ideas que puedes tener en cuenta para hacer tus elecciones:
Y ahora que sabes todo esto, ¿nos cuentas cuál es tu sabor de helado favorito?
Fuentes:
Helado. Wikipedia.
Helados ligeros saludables. Directo al Paladar.
FoodDataCentral. USDA